2 mins de aprendizaje
Emprender ese una actitud, y yo la tengo. Quiero contarte por qué he decidido crear una academia de formación online para profesionales del Trabajo Social, lo que ha sido más difícil y en qué se diferencia con otras plataformas.
El Trabajo Social está viviendo una gran revolución, sobre todo cuando hablamos de emprendimiento. Quiero contarte mi nuevo proyecto emprendedor, seguro que te será útil.
Cuando finalicé mis estudios universitarios, allá por el 2012, quise ampliar mis conocimientos académicos realizando distintas formaciones.
Recuerdo que perdía muchas horas buscando en internet plataformas de formación con cursos interesantes para el Trabajo Social, y cuando las encontraba me preguntaba ¿los podré aplicar en Trabajo Social? ¿serán buenos los docentes? ¿formación online… tendré un feedback y seguimiento según vaya aprendiendo?
Es cierto que encontré algún que otro curso muy interesante, a buen precio y que la metodología se adaptaba a mis necesidades. Pero también es cierto que más de un curso lo empecé y jamás lo terminé: los materiales eran power point, poco actualizados, y no tenía seguimiento por parte de los docentes.
Venga, te dejo que te saltes alguna parte...
La Academia online para el Trabajo Social
Basándome en mi propia experiencia, y viendo que en Instagram muchas personas me preguntaban por cursos de calidad para nuestra profesión, vi a finales del año pasado montar una academia de formación online para el Trabajo Social.
Tras la Navidad, me puse a investigar, leer, y conocer el mercado; y en enero ya tenía claro qué quería crear.
Decidí crear una página web donde fuese un punto para encontrar cursos de formación. ¿Has usado alguna vez booking? Pues lo mismo, pero cursos para profesionales del Trabajo Social.
La idea es que la plataforma recopile los mejores cursos para nuestra profesión. Cursos donde garantizo al 100% su calidad, utilidad y profesionalidad de los docentes. ¡No valen todos los cursos!
Estos cursos pueden tener temáticas puras de nuestra profesión, u otras materias que no son propias del Trabajo Social, pero que son conocimientos que podemos necesitar en nuestro día a día.
A día de hoy (1 abril 2021) la plataforma cuenta con 17 cursos con distintas temáticas: igualdad de género, sexualidad, mediación, emprendimiento, etc.
Las novedades de esta web, comparando con otras plataformas, son dos:
- Aquellas personas o webs que ya tienen un curso creado, podrán anunciar su curso en la plataforma. Llegando así a más personas; y con la garantía que proporciono: 100% útiles y profesorado cualificado.
- Y aquellas personas que quieran dar formación, y no cuenten con herramientas propias, podrán usar la propia plataforma para subir sus cursos, compartir sus conocimientos y ganarse un dinero extra.
Además de los cursos, quise que la plataforma fuese algo más. Por ello, también albergará eventos como talleres, webinars o workshop.
¿Por qué este nombre?
Cuando estuve pensando en qué nombre poner al proyecto, tuve muchas dudas. Aunque no sea padre, pero creo que viví las mismas sensaciones que cuando te toca poner nombre a tus hijos.
Tras muchas ideas, finalmente decidí usar un nombre ya reconocido por muchos ‘La Academia de Trabajo Social’.
Así es, quise usar el mismo nombre que mi podcast. ¿Por qué? Muy sencillo. El podcast siempre ha pretendido ser un espacio radiofónico donde poder aprender. Bajo esa premisa del aprendizaje, creé la academia.
Ahora ‘La Academia de Trabajo Social’ es una plataforma de formación ya sea a través de cursos, podcast, o eventos.
Lo más difícil
A la hora de comenzar un proyecto así, te surgen muchas dudas, inquietudes y comeduras de cabeza.
Mi primer problema fue elegir una web donde poder albergar todos los cursos. Cierto es que sé hacer páginas web, pero nunca me había planteado formar una plataforma de formación.
Gracias a Google, Youtube y muchas horas conseguí crear una web donde poder alojar cursos, poder comprar cursos y poder evaluar esa formación.
Otra dificultad que encontré fue la parte de asesoramiento legal. En este sentido tenía dos opciones: o aprender yo, o que alguien me lo hiciese.
En este sentido opté por la segunda opción. Decidí contratar una gestoría que me ha estado ayudando y acompañando desde el primer momento.
Asesoramiento gratuito
Cuando estuve planteando la idea, siempre recordaba aquellas dudas que yo tenía a la hora de buscar un curso: ¿qué curso es mejor? ¿cuál se aproxima más al ámbito en el que me quiero especializar?.
Por ello, desde el minuto uno, supe que en la academia iba a existir un espacio de asesoramiento gratuito. Donde cualquier persona podrá ponerse en contacto conmigo, contarme qué necesidad de formación tiene, y yo -de manera gratuita- informarle de los cursos que le pueden venir mejor.